Angela Merkel ordenó prohibir la apertura de negocios no esenciales y centros de educación primaria, secundaria y guarderías hasta los primeros días del año 2021.

La canciller constató los "muy numerosos fallecimientos" debidos a la epidemia coronavirus, y el "crecimiento exponencial" de las infecciones. Además, los ciudadanos no podrán reunirse para festejar Año Nuevo.

Merkel solicitó que "para aplicar en todo el país el principio de 'nos quedamos en casa'", las empresas deberán permitir a sus empleados trabajar desde sus casas u otorgarles vacaciones hasta el día que se levante el confinamiento parcial recientemente convocado.

Estas medidas fueron adoptadas por Merkel tras una reunión este domingo con los 16 líderes regionales de las estados federados.

El número de nuevas infecciones diarias rozó las 30.000, muy por encima del promedio diario de la primera ola que Alemania controló mejor que muchos países europeos. El récord de muertos en un día se batió con 598.

Con los nuevos datos, el balance de la pandemia en territorio germano asciende a 1.320.716 personas contagiadas y 21.787 decesos, según el balance publicado por el Instituto Robert Koch (RKI), la agencia gubernamental alemana encargada del control de las enfermedades infecciosas.