Así lo manifestó la Cámara Argentina de la Industria Pesquera, realizando un balance negativo del último año. En la proyección a futuro no parece vislumbrarse grandes cambios y agregaron “La actividad está muy complicada”, manifestaron.
“Al estar muy bajo el tipo de cambio, todo tipo de exportación que se realiza, salvo cuestiones excepcionales como el langostino, se están comercializando sin márgenes”, aseguró el presidente de Caipa, Fernando Rivera, quien subrayó: “Las empresas no están muy interesadas en trabajar a fondo porque en cuanto más trabajan, más pérdida tienen. Hay empresas que están trabajando a pérdida con muchas especies”.
En la misma línea, el principal referente de la cámara señaló que en el panorama actual “el empresario no tiene ningún tipo de rentabilidad”. “Salir a pescar sin rentabilidad es correr un riesgo y en muchos casos es incrementar el quebranto que ya tiene”, sostuvo.
“El problema que tiene la Argentina es que está muy cara en todo, entonces todo lo que se hace acá sale muy caro y cuando se vende y se traduce a dólares, se recibe muy poco”, explicó.
Rivera reconoció que este es un problema que “arrastra” la economía argentina desde hace años, lo que dificulta el desarrollo de actividad netamente exportadora: “Es una situación que viene de arrastre. Hace seis o siete años que viene bajo el tipo de cambio. A pesar de las últimas gestiones, no se logró un valor competitivo. Esto que le pasa a la pesca es muy similar a lo que sucede con las exportaciones del interior del país”.