A lo largo del receso fueron secuestrados 377 vehículos por diferentes motivos. Por conducir alcoholizados fueron sancionados 54 conductores.
Los operativos se realizan diariamente en el marco del Programa de Seguridad Vial de la secretaría de Gobierno, cuyo objetivo es que se respeten las normas de circulación, disminuir la cantidad de siniestros viales, y cuidar la salud y la vida de los vecinos.
La Dirección General de Tránsito, a cargo de Claudia Rodríguez, junto a la Agencia Nacional y la dirección provincial de Seguridad Vial, durante las vacaciones de invierno –entre el 18 y el 29 de julio- secuestraron 377 vehículos, 66 motos y labraron 2010 actas por distintas infracciones.
En cuanto a los operativos de alcoholemia, durante el mismo período, se detectaron a 54 conductores que lo hacían con una graduación superior a la que permite la ley (0.5 ml).
El no uso del casco (aún cuando el conductor lo portaba en la moto) y la falta de documentación básica fueron las faltas más comunes.
“A pesar de la fuerte presencia del Estado, la falta de casco es la infracción más recurrente entre los motociclistas, implica un riesgo muy grande para todos los conductores, por eso es que trabajamos a diario para controlar y generar mayor responsabilidad, fundamentalmente entre los jóvenes, quienes estadísticamente son los más vulnerables en casos de siniestros viales”, aseguró Rodríguez.
En esa línea, la funcionaria recordó que “debemos tomar conciencia y trasladar, también a nuestros seres queridos, la importancia de utilizar los elementos de seguridad, como son el casco y el cinturón de seguridad, y el respeto por las normas de tránsito.”