En una entrevista concedida a Rubén Ferrari, Dalia sostuvo: “el problema de las luminarias es uno de los tantos que tenemos en el barrio”.

“Días atrás – prosiguió – hemos tenido una charla entre los habitantes de la zona y luego algunos de nosotros hicimos una recorrida para poder fundamental nuestro reclamo”.

Más adelante, referenció: “en esa suerte de paseo descubrimos un montón de farolas apagadas que hasta el momento nadie ha repuesto”.

Sobre el mismo tema, el vecino puntualizó a colación: “sabemos que personal del EMVIAL ha pasado por aquí, pero desconocemos qué es lo que ha hecho, pues no han arreglado ni cambiado los artefactos, ya sean lámparas o carcazas, rotas o faltantes”.

“En consecuencia – remató – tenemos varias cuadras sin iluminación y ello nos preocupa por las consecuencias que puede traer la oscuridad en relación con la delincuencia”.

Por otra parte, Dalia dijo: “la situación del asfalto es decadente, fundamentalmente en el sector de La Florida nueva, es decir, pasando el arroyo”. “La granza está en mal estado y hay muchos pozos; en definitiva, ese espacio está intransitable”, se quejó.

Y al respecto, denunció: “no sabemos qué es lo que hace la asociación de fomento, pues nunca responde a nuestros reclamos e inquietudes. Además, a veces queremos dialogar con sus autoridades, pero por circunstancias especiales los horarios no coinciden y no nos pueden atender”.