Presidente del MORENO*" />
Cazador de
Noticias
Jueves - 24 de Julio de 2014 13:55
“Los argentinos no queremos pagar mayores tarifas”

Por José Rigane
Presidente del MORENO*

El aumento de las tarifas de los servicios públicos, principalmente del gas, vuelve a agitar la protesta de los ciudadanos. En particular en la ciudad de Mar del Plata los vecinos reclaman en las oficinas de la distribuidora Camuzzi Gas Pampeana por la quita de los subsidios, que se traduce en aumentos de más del 120 % en el nuevo cuadro tarifario, con respecto a un año atrás. Y en momentos en que el clima invernal obliga a un mayor consumo de gas.

Con las nuevas tarifas, la empresa incumple un amparo judicial que ordenó en el año 2009 no innovar en Mar del Plata en la aplicación del decreto 2067/08 que establecía incluir en las facturas un monto relacionado con el costo del gas importado. Amparos similares se sentenciaron en todo el país, fundamentados en que el nuevo cargo debía ser establecido en la ley de Presupuesto nacional. El Congreso Nacional modificó el Presupuesto incorporando la quita pero la Justicia ratificó el amparo. De cualquier manera las empresas distribuidoras de gas y luz han logrado durante años evitar sanciones o incumplir normas, por la vía de apelar las sentencias judiciales o negociar con los entes reguladores o simplemente ignorándolas. Ahora se espera que las tarifas aumenten apreciablemente en los próximos meses.

A los usuarios les queda el recurso de reclamar ante la empresa, sufriendo las incomodidades y el trato, a veces vejatorio, a que se les somete durante el trámite. Además la suspensión del pago de los aumentos que se obtiene, es provisoria; los usuarios se arriesgan a que, en caso de que la sentencia definitiva sobre el decreto revoque el amparo, deban pagar todos los aumentos suspendidos. Pero no puede sorprender que muchos usuarios se presenten a pedir la excepción: la inflación está reduciendo el poder adquisitivo de una gran parte de los ciudadanos, en particular de los jubilados, mientras las cifras oficiales siguen mintiendo sobre la reducción de la pobreza en el país.

Los subsidios son criticados por buena parte de la opinión pública porque, se argumenta, benefician a sectores de los usuarios que pueden pagar los aumentos de gas, luz o agua, ya que gastan sumas mucho mayores en consumos más prescindibles, como telefonía celular o televisión por cable. Es innegable que los subsidios a las tarifas residenciales se establecieron sin una discriminación adecuada de la capacidad de pago del usuario. En cambio ahora hay dos vías para conservar el subsidio; según una de ellas se puede solicitar la excepción demostrando tener pocos recursos o condiciones desfavorables de vivienda o salud; en otra, quienes ahorren un 20% en el consumo del bimestre respecto del mismo período del 2013 conservarán el subsidio, y quienes ahorren entre el 5% y el 20% conservarán un 50% del mismo. Este último recurso es bastante injusto, en tanto quienes el año anterior derrocharon -al amparo del subsidio- ahora pueden ahorrar y evitar el aumento, recurso que no tienen quienes, por razones de precariedad de la vivienda o de salud, no pueden reducir el consumo.

Y si de injusticias se trata, recordemos que una buena parte de la población del país -aproximadamente un 40%, que vive en el noreste del país y en los grandes conurbanos- no tiene provisión de gas natural por red, por lo que debe consumir gas licuado envasado. Y aunque las garrafas tienen una “tarifa social”, en invierno se pagan más y conseguirlas requiere tiempo y esfuerzo. Además no hay que olvidar que también se subsidia a empresas y centrales eléctricas el consumo de gasoil cuando se le corta o restringe la provisión de gas, cuando escasea, para dar prioridad al suministro a los consumidores residenciales.

Está claro que el Gobierno Nacional no puede, ni quiere, sostener los subsidios. Y también que las tarifas no alcanzan para cubrir los costos de los servicios, además de las ganancias que pretenden las empresas que forman la cadena de producción y comercialización, y que el Gobierno subsidia. En el caso del gas el aumento de los costos se potencia por la gran dispersión de empresas que hoy atienden el servicio de distribución y comercialización que Gas del Estado por sí sola prestó durante más de cuarenta años. Para el Gobierno la cuenta de la energía es cada vez más deficitaria, principalmente por el costo de importación en gran parte de gas, que llega por gasoducto desde Bolivia, o de gas licuado que traen barcos a los puertos de Bahía Blanca y Escobar, donde se regasifica para luego inyectarlo a la red.

Todo comenzó con la ofensiva neoliberal que, desde los años ´90, privatizó las empresas estatales del sector energético, permitió a las empresas privadas la libre explotación y exportación de petróleo y gas y de las ganancias que obtuvieron, sin reponer las reservas extraídas. Perdimos el autoabastecimiento de hidrocarburos y hoy, aún recuperada en parte la empresa YPF para el Estado, estamos lejos de lograr un ritmo de crecimiento en la extracción de gas y petróleo que pueda sostener el aumento del consumo, aún en la actualidad, en una fase de retracción de la economía.

El proceso para revertir esta situación no será sencillo ni breve. Hay que recuperar la potestad del Estado para definir una política energética que dé prioridad a las necesidades de los ciudadanos y del comercio y la industria del país, y no a los intereses de las multinacionales petroleras, que hoy retacean sus inversiones reclamando aún más facilidades y ventajas económicas y presionando sobre las decisiones sobre la exploración y explotación de nuestros recursos. Hace falta una fuerte decisión política de los Gobiernos Nacional y provinciales en este sentido. En el mediano y largo plazo uno de los objetivos principales debe ser reducir la fuerte dependencia de la matriz energética del petróleo y, sobre todo, del gas, impulsando el desarrollo de otras fuentes energéticas, la hidroelectricidad, la energía nuclear, y sobre todo la eólica y solar.

Para el pueblo argentino queda la lucha, hoy para resistirse a pagar, también a través de las tarifas de los servicios públicos, las consecuencias de políticas que han venido favoreciendo la concentración y extranjerización de la economía y que llevan al empobrecimiento y deterioro de las condiciones de vida a gran parte de la ciudadanía.
*Movimiento por la Recuperación de la Energía Nacional Orientadora
Aclaración: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.
Efemérides - 24 de Julio
1783Nace el libertador Simón Bolívar
Día de la Integración de América Latina
Día de San Francisco Solano
Día de la Evangelización en América
1802Nace el novelista y dramaturgo francés, Alejandro Dumas
1852Urquiza asume el gobierno de Buenos Aires
1895Nace el escritor, Robert Graves
1917Mata-Hari comparece ante un tribunal militar, que la condena a muerte por espionaje
1926Se inaugura en Buenos Aires el monumento al Gral. Manuel Dorrego
1928China adopta el sistema métrico decimal
1951Nace la actriz, Lynda Carter
1958Frondizi anuncia el lanzamiento de su política petrolera
1964Nace el músico, Gabriel Julio Fernández Capello “Vicentico”
1976Una nube de gas letal causa una catástrofe ecológica en Seveso, Italia
1980Muere el actor británico, Peter Sellers
1998Se lanza el Windows 98 en España
2003Tras asegurar que habían sido asesinados en un enfrentamiento, Estados Unidos difunde las fotos de los hijos de Saddam Hussein muertos
2008Condenaron al represor Luciano Benjamín Menéndez a prisión perpetua
2010Fallece en Necochea el ex boxeador y padre de “Uby Sacco”, Ubaldo Francisco Sacco
2013Mueren 79 personas por el descarrilamiento de un tren en España(Santiago de Compostela)
2017Choque entre un tren del Sarmiento y un colectivo en el gran Buenos Aires, dejó como saldo dos muertos y 14 heridos
2019Después de 38 años cerraba en Mar del Plata la disquería AGB
2019Murió Rutger Hauer, el célebre replicante de "Blade Runner"
2021El surf y Leandro “Lele” Usuna tuvieron su histórico debut en los Juegos Olímpicos