El proyecto surgió de la unificación de sendas iniciativas de los diputados Walter Carusso, Pablo Farías, Mónica López y Rocío Giaccone y fue girado a la Cámara de Senadores. El diputado del FAP, Pablo Farías, aseguró que “es una alegría enorme, porque constituye un avance importantísimo para un país que tiene 700 mil personas que padecen alguna discapacidad visual y hoy sólo 26 pueden contar con un perro guía”.

Farías destacó que “esta iniciativa contribuye a darle mayores niveles de independencia y libertad a las personas con discapacidad visual. Porque el perro guía no es una mascota, es un animal de trabajo y les permite organizar mejor en su vida: cuestiones tan simples como llegar temprano a su trabajo o llegar secos los días de lluvia”.

El diputado marplatense también aseguró que la aprobación de este proyecto es “un llamado de atención para toda la sociedad, para los dueños de restaurantes, hoteles, para los conductores de micros, etc que no van a poder objetar la circulación de perros lazarillos con sus usuarios. Muchas veces no nos ponemos en el lugar del otro. No nos imaginamos los enormes obstáculos que se encuentra las personas con discapacidad visual al caminar y transitar por nuestro país”.

El proyecto

La iniciativa asegura el derecho al acceso, deambulación y permanencia a lugares públicos y privados de acceso público y a los servicios de transporte, de toda persona con discapacidad visual acompañada por un perro lazarillo, de guía o asistencia. También podrán hacerlo las personas encargadas de entrenar a los animales durante el proceso de entrenamiento.