El director general de Inspección General Eduardo Bruzetta, explicó que “en el día de ayer sobre horas del mediodía se procedió a reclausurar la unidad turística fiscal denominada playa chica, dado que se había violado la clausura impuesta anteriormente, ya que existían dos causas anteriores que no habían sido resueltas en los juzgados de faltas municipales. Ante este hecho nos hicimos presentes verificando que el establecimiento gastronómico estaba brindado servicios al publico, por lo tanto se procedió a realizar las actas correspondientes de infracción y la consecuente clausura al mismo”.

“Para evitar la continuidad de esta conducta infractora se procedió a aplicar la Ordenanza 5355 que faculta al municipio al secuestro preventivo de todos aquellos bienes y herramientas con el fin de que el establecimiento no siga desarrollando la actividad e infringiendo la sanción impuesta. Esta medida se tomó por la falta de medidas de seguridad que tiene el establecimiento, tanto estructurales como de seguridad y salubridad, dado que existe un informe emitido por Obras Públicas, dependiente del ENOSUR, el cual es lapidario con respecto al estado actual de la construcción” expresó el funcionario.

Para finalizar, Bruzetta agregó que “en este marco se procedió al secuestro preventivo de mesas, sillas y sombrillas, al corte de gas y al bloqueo del suministro de agua para evitar que el concesionario siga desarrollando actividades y mostrando una irresponsabilidad para con la integridad física y la salud de las personas, ya sea trabajadores como los eventuales clientes que allí se congregaban”.