En el marco de la comisión de Hacienda, este jueves, se generó un contrapunto cuando el edil oficialista Agustín Neme trajo a la discusión sobre la problemática del desempleo en General Pueyrredon, la necesidad de una reforma laboral, planteando que “un municipio por más presupuesto que tenga no va a resolver una cuestión estructural, ojalá el gobierno nacional - éste o el que venga - se anime de una vez por todos a modificar la ley laboral y acompañe a los inversores que se animen a tomar a tomar empleados”.

El secretario de Desarrollo Productivo, Adrían Consoli, que concurrió a la reunión para exponer sobre el presupuesto asignado a su cartera, coincidió en que “hay muchas necesidades de reformas normativas que exceden la jurisdicción propia de la Municipalidad”.

En tanto que, desde el Frente de Todos, el concejal Roberto Páez recogió el guante refutando que “seguir pensando que se va a generar empleo a través de normas flexibilizadoras, y precarización me parece que realmente atrasa. Hay que generar empleo con la participación y la regulación del estado, con empresarios que estén dispuestos a invertir en serio”.

Tomando distancia de la discusión, Consoli se excusó aclarando que “en ninguna parte de mi alocución hable de flexibilización y me encantaría tomar un café con usted porque posiblemente coincidamos con algunas cosas y en otras no”.

Por su parte, Neme reafirmando su credo liberal insistió que “este país necesita una nueva ley laboral, no creo en las corporaciones empresariales, el empresario es el que genera laburo y yo voy a estar al lado del que genera laburo”

Ante lo cual el concejal Páez volvió a arremeter retrucando que “se ha probado de todas las maneras posibles que las distintas leyes que se denominan flexibilización o precarización laboral no han servido para generar empleo, en la década del 90 quedó en claro que en todos los países en los que se aplicaron estas leyes lo que se logró fue el efecto contrario, del 10 de diciembre de 2015 al 2019 tuvimos la triste experiencia en nuestro país del cierre de 3000 PyMEs”.

Y concluyó, sentenciando que “ahora está de moda hablar de las castas, se habla de las castas políticas, pero no escucho a nadie hablar de las castas empresariales que son las que en muchas oportunidades vacían los países, fugan divisas y no invierten, y los que en definitiva tratan de explotar a los trabajadores. No podemos seguir pensando que si le sacamos derecho a los trabajadores vamos a generar más empleo, es algo que atrasa”.