Por Gabriel Solano
Diputado del Partido Obrero
Alberto Fernández y Cristina Fernández son valientes para ajustar a los jubilados y están encogidos ante el FMI.
Esta ley, con la que esperan ahorrarse 1 punto entero del PBI a costa de perpetuar jubilaciones de miseria es una exigencia del FMI para firmar el acuerdo de refinanciamiento de la deuda.
Y forma parte de un plan de reformas estructurales que el FMI impone en todo el mundo, que presentan aquí como decisión propia.
Lejos del 20% de aumento con la plata de la Leliqs como habían prometido tenemos la situación invertida y un gobierno subyugado a las exigencias del Fondo Monetario Internacional mientras hace pagar la crisis con más ajuste a los trabajadores.
El pacto con el FMI es incompatible con las condiciones de vida y los intereses de la mayoría de la población.
Los trabajadores debemos rechazar este ajuste y esta ley y defender una salida propia a las crisis.
Aclaración: La opinión vertida en este espacio no siempre coincide con el pensamiento de la Dirección General.