Sobre los motivos que lo llevaron a realizar la propuesta, Maraude aclaró que “vimos que existe la necesidad de contar con una herramienta para el control de la salud física de los niños que realizan prácticas deportivas, que ayude a  monitorear las acciones vinculadas a la salud con la actividad física y el deporte”.
 
El proyecto de ordenanza establece que el Servicio de Medicina Deportiva Infanto Juvenil funcionará en el EMDER (Ente Municipal de  Deportes y Recreación), y estará formado por un equipo interdisciplinario integrado por: un médico clínico; un pediatra; un deportólogo y un cardiólogo. Al mismo tiempo aclara que estos profesionales serán designados a través de un concurso realizado por la Secretaría de Salud Municipal. El equipo interdisciplinario estará facultado para emitir un certificado de Aptitud Física Deportiva, que será presentado ante la autoridad o ente que lo requiera y que tendrá una duración anual.
 
El concejal impulsor de la iniciativa agregó que “el deporte es la herramienta de inclusión e integración social más importante que se conoce, siendo el instrumento más adecuado para transmitir hábitos de vida sanos, por eso tenemos que preocuparnos por la prevención de nuestros deportistas jóvenes con el objetivo de mejorar su calidad de vida”.
 
Los fundamentos del proyecto de ordenanza hacen mención a la importancia de la medicina preventiva orientada a evitar padecimientos y con el propósito de buscar el mayor bienestar posible tanto físico, mental y social de los menores. Sobre los objetivos principales de la propuesta, Maraude expresó que “queremos generar las herramientas para poder diagnosticar precozmente patologías que puedan poner en riesgo la vida de los niños y detectar lesiones que pudieren significar una contra indicación absoluta o relativa para la realización de determinadas disciplinas”.
 
De crearse el Servicio de Medicina Deportiva Infanto Juvenil en la ciudad, las autoridades de contralor serán: la Secretaría de Salud y el EMDER.