En la misiva de la empresa elaborada por su Gerencia de Obras al Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata rechazando las observaciones presentadas en el informe “Desagües Pluviales Arroyo del Barco - Análisis de las obras de descarga” realizado por el Ing. Ricardo Schwarz y destacando la necesidad de dar prioridad a la ejecución de la obra con el objeto de resolver la problemática de las inundaciones en los barrios que hoy resultan afectados por esta situación.

Asimismo, se destaca que el proyecto fue aprobado por la Dirección Provincial de Saneamiento y Obras Hidráulicas de la Provincia de Buenos Aires y posee Estudio de Impacto Ambiental aprobado por el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS).

Cabe remarcar que el “Proyecto de Desagües Pluviales–Cuenca del Arroyo Del Barco”, es una obra que beneficiará a los vecinos de Zona Puerto, Villa Lourdes, Las Avenidas, Peralta Ramos Oeste, El Progreso, El Martillo, Florencio Sánchez, Cerrito Sur, Cerrito y San Salvador, Juramento, Gral. San Martín, Termas Huinco, Colinas de Peralta Ramos y Punta Mogotes que durante muchísimo tiempo han sufrido las consecuencias de las inundaciones.

En la nota de respuesta enviada al Consorcio Portuario se adjuntó  una foja obrante en el Expediente emitida por la Dirección Provincial de Saneamiento y Obras Hidráulicas (DIPSOH) donde consta que el Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata participó de las reuniones donde se fijaron los posibles puntos de salida  de la obra “Proyecto Pluvial Arroyo del barco”.

En la nota enviada, Obras Sanitarias destaca que el informe del Consorcio Portuario utiliza parámetros que no se ajustan a los que son de aplicación no sólo en Argentina sino en el resto del mundo para el diseño, proyecto y construcción de obras de desagüe pluvial.  Prueba de ello, es que en relación al tratamiento descripto en el inciso “7.9 Componentes del Proyecto”, el mismo es casi de imposible implementación, tanto en términos técnicos como económicos, dado que el alcance del tratamiento propuesto para un caudal de 131 m3/seg.  no existe en el país, y probablemente tampoco en Latinoamérica.

Asimismo, OSSE destaca en la contestación que la salida del Arroyo del Barco no puede considerarse una “acción intrusiva” visto que el Puerto de Mar del Pata fue el que desarrolló sobre la desembocadura natural del citado arroyo y fue esta circunstancia la que impuso la necesidad de su entubamiento.

Dicho entubado devino como un impacto negativo sobre la naturaleza y el entorno al momento de su realización, naciendo como consecuencia de la instalación del Puerto como tal. Este entubado, si bien no modificó sustancialmente el punto de vuelco, sí  limitó el drenaje natural del curso de agua, retrasando el flujo en los momentos de mayor demanda, esto es, cuando se producen lluvias de envergadura. Esto  hoy perjudica manifiestamente a la ciudad, generando la necesidad de construir obras de muy alto costo e impacto importante, a fin de resolver la problemática de las inundaciones en los barrios que hoy resultan afectados por esta situación. El objetivo  de evitar inundaciones  motiva que los estamentos del Estado (Nación, Provincia y Municipio) propendan a llevar adelante este proyecto  para su construcción.

Por otra parte, Obras Sanitarias recuerda que el autor infiere que el nuevo conducto modificará las condiciones y características de las aguas del espejo portuario. En tal sentido, OSSE destaca  que el volumen de agua que precipita sobre la cuenca históricamente salió y hoy lo sigue haciendo  por la conducción existente.

La consecuencia de mejorar las condiciones de desagüe del arroyo del Barco, no trae consigo un aumento del volumen de agua a evacuar,  el volumen es el mismo, ni más ni menos. Sin embargo el tiempo de escurrimiento será sustancialmente menor.

OSSE destaca que en consecuencia, no se producirán inundaciones en la cuenca más alta y entonces, no habrá “arrastre” de residuos, ni mezcla de fluídos cloacales con pluviales, que lleguen finalmente a la desembocadura en el puerto. Así, la obra, beneficia a toda la cuenca, incluso al Puerto.

La consecuencia del entubamiento y por ende de la falta de ejecución de la obra proyectada es la inundación de parte de la cuenca hídrica aguas arriba, donde una importante población ve afectados sus derechos básicos a un ambiente digno. Las cuestiones de posible afectación a la salubridad se hacen presentes, y el agua, que naturalmente debía evacuarse sin provocar inundaciones, fluye más lentamente por estar el canal entubado, pero en la misma dirección. Finalmente el agua caída sale por la misma desembocadura, pero más despacio, llevando entonces consigo las excretas y residuos provenientes de las inundaciones.

El estudio de impacto ambiental, incluye como medida de mitigación la retención de elementos flotantes, residuos, lo cual puede lograrse  aprovechando la falta de oleaje en la zona de descarga. Esta retención de sólidos hoy no existe, con lo cual la obra proyectada también representa en este aspecto una mejora de la situación actual.

El proyecto de la DIPSOH mejora la velocidad de escurrimiento, evitando que precipitaciones moderadas provoquen acumulaciones de agua que afectan los bienes de los habitantes de la cuenca y la transitabilidad de aquellos que circunstancialmente recorren la zona. No obstante es el mismo agua que hoy llega al puerto el que desaguaría en el futuro conducto, con la única diferencia que al ser más rápido su transporte se evitarán inundaciones en varios barrios de la ciudad.

Por otra parte; OSSE señala que la necesidad de aumentar la capacidad de descarga de los entubamientos originales no es una cosa nueva, ya que en el proyecto de la última salida, se preveían dos celdas, hecho que debió estar previsto en la planificación del desarrollo portuario

En relación a la caracterización de los líquidos vertidos cabe destacar que OSSE desde hace más de 20 años viene haciendo enormes esfuerzos para mejorar la calidad de los efluentes pluviales, con la firme convicción de mantener el criterio de desagües separativos, y para ello ha desarrollado obras y acciones para evitar las conexiones cloacales al sistema pluvial, criterio que se va reafirmando año a año, cegando intrusiones clandestinas, satisfaciendo la demanda de desagües cloacales, mejorando las instalaciones. Hoy la cuenca hídrica que nos ocupa está cubierta casi al 100% con desagües cloacales que pertenecen a la III Cloaca Máxima.

En tal sentido, OSSE destaca en la nota enviada  que  todavía hay sectores dentro de la jurisdicción portuaria  que deberían completar sus instalaciones cloacales, obra que deberá desarrollar el Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata.

En relación a la recolección de residuos, toda la cuenca cuenta con ese servicio con igual régimen que el resto de la ciudad, con un importante avance de separación en origen.

Con respecto al arrastre de suelos y materiales pétreos (granza), el Municipio está comprometido en un plan de pavimentación que será posible a medida que se integren los nuevos desagües.

Existe prohibición de vuelcos a vía pública debido  al accionar de OSSE, razón por la que este organismo dispone de inspección disponible las 24 horas al día, todos los días del año. Asimismo se propende a que las industrias cumplan con las reglamentaciones vigentes y sean incentivadas para la mejora continua de sus procesos.

OSSE tiene estudios del cuerpo de agua del puerto, y ha realizado ensayos de metales pesados y carga orgánica de los sedimentos. De los mismos surge la presencia de contaminación en sus aguas y sus lechos - común en casi todos los puertos - como consecuencia de la propia actividad portuaria  junto a la muy limitada circulación de las aguas y escaso movimiento sedimentario.

Por otra parte, cabe señalar que de resultas de las muestras tomadas durante toda la temporada estival 2012/2013 en la costa correspondiente a las playas del Club Náutico Mar del Plata, surge que dicho sector ha cumplido con las normas vigentes para la calidad recreativa de las playas.

Esto demuestra la incidencia que sobre el sector de la costa portuaria genera la misma actividad portuaria, independientemente de cualquier otra actividad,  lo cual se replica en gran parte de los sitios que pose en el Puerto.
Asimismo, y conforme surge de la documentación en poder de OSSE, la DIPSOH ha evaluado distintas alternativas para cambiar el punto de descarga; resultando las mismas inviables desde el análisis técnico y económico.

En la misiva enviada al Consorcio Portuario, OSSE   señala que si bien la protección del medio ambiente es uno de los objetivos que propenden al único y último fin,  también ha de serlo la preservación de la salud,  la educación, evitar los efectos de las inundaciones, abastecer de agua, etc., todos caminos que propenden a ese último gran fin, generar bienestar al ser humano.

En la convicción de considerar imprescindible hallar consensos y soluciones entre los diversos actores relacionados con el proyecto, OSSE propone crear un ámbito de análisis entre la Municipalidad de Gral. Pueyrredon, el Consorcio Portuario Regional, la DIPSOH y la Subsecretaría de Actividades Portuarias, a fin de compatibilizar intereses y arbitrar rápidamente una solución realizable a corto plazo.

Por lo expuesto, y entendiendo la importancia que tiene la implementación de este Proyecto para toda la comunidad marplatense, OSSE ratifica  su posición de apoyo hacia este proyecto que permitirá mejorar la calidad de vida de gran parte de los vecinos  de Mar del Plata.