Durante la jornada de este jueves, personal de la División Contralor, dependiente de la Dirección de Movilidad Urbana procedió a realizar un operativo de control de transporte automotor. En continuidad con el trabajo programado, respecto a la detección de

vehículos que prestan servicio de transporte de personas sin contar con la respectiva habilitación municipal, y de acuerdo a información relevada, donde se daba cuenta que en avenida Colon al 10500 funcionaba una remisería sin habilitar, se llevó a cabo un procedimiento tendiente a verificar el cumplimiento de las normas vigentes en la materia, con colaboración de personal de la Dirección de Inspección General y con el apoyo de Policial de la Provincia de Buenos Aires.

Como consecuencia del operativo, se procedió al labrado de un acta de constatación por parte del personal de la Dirección de Inspección General y posterior clausura, secuestrando elementos utilizados para el desarrollo de la mencionada actividad, tales como telefonía y elementos de promoción.

Adicionalmente se procedió al secuestró de siete vehículos: Renault 19, color Negro, Dominio CIS 156 (Reincidente); Fiat Siena, Gris, DPD 424; Renault 19, Gris, BRP 414; Renault Kangoo, Bordo, HMB 990; Peugeot 504, Rojo, ABB 383; Peugeot 504, Negro, CKR 261; y un Fiat Siena, Gris, DOT 360.

Operativos de control en la vía pública

Además, en el marco de diversos operativos de control del transporte de pasajeros, el martes pasado se secuestraron dos vehículos que también realizaban transporte de personas sin habilitación municipal, un automóvil marca Fiat Duna dominio DEV 294 color negro, y un Citroen Berlingo color Gris dominio EBZ 782.

Cabe destacar que un transporte debidamente habilitado reúne las condiciones técnicas indispensables para transportar personas, así como la aptitud técnica y la identificación del chofer. Asimismo, es importante recordar que al contratar un vehículo no habilitado para transportarse, diversos riesgos se potencian mutuamente al no verificarse fehacientemente si el vehículo en cuestión reúne las condiciones técnicas mínimas para trasladar personas o si el conductor está capacitado para realizar dicha función. También, se suma la inexistencia de un seguro con cobertura para terceros transportados, y mayor riesgo aún al no verificarse la identidad de quien conduce, y los riesgos que conlleva compartir vehículo con una persona que de por si esta desarrollando una tarea ilegal.