En orden a lo establecido por la normativa vigente, durante el período comprendido entre el 15 de diciembre y el 28 de febrero, se prohíbe el riego de jardines y/o espacios verdes en la franja comprendida entre las 10 y las 22. De todos maneras, el texto aclara que en los horarios permitidos se deberán emplear dispositivos de ahorro y evitar escurrimientos a la vía pública al ejecutar la actividad.

De idéntico modo, el Reglamento General del Servicio Sanitario reglamenta el lavado de veredas y patios y, por consiguiente, establece pautas para su ejercicio: desde el 1 de noviembre hasta el 30 de abril sólo se podrá llevar a cabo de 0 a 8.30 mediante artefactos que contribuyan al ahorro, como balde, hidrolavadora o manguera con gatillo de corte.

Asimismo, en lo que respeta a la recreación, la legislación de referencia estipula las piletas de natación, fijas o desmontables, tanto de material como lona, podrán ser abastecidas únicamente entre las 22 y las 8. Además, se sugiere utilizar un método que promueva el máximo aprovechamiento del agua y que evite rellenados innecesarios.

Vale destacar que, en este sentido, que el desarrollo de prácticas fuera de lo indicado será pasible de sanciones por parte de la empresa.

Al respecto, el presidente de Obras Sanitarias Mar del Plata – Batán, Ing. Mario Dell’Olio, expresó: “la tutela que nos corresponde en orden a la aplicación de esta ordenanza está íntimamente relacionada con la necesidad de cuidar los recursos naturales, el fomento de la conciencia ecológica y el compromiso con la comunidad respecto de nuestra tarea prioritaria: la permanente mejora de la calidad del servicio”.

Y completó: “detrás de esos objetivos es que procuramos el refuerzo de la conciencia solidaria por parte de nuestros vecinos, ya que racionalizar el consumo del agua es una tarea de todos”.

Sobre este aspecto en particular, es imprescindible considerar la importancia de prevenir el goteo de canillas, revisar el correcto funcionamiento de las instalaciones sanitarias internas y contar con tanque de reserva en cada hogar.

En otro orden, también de significativa trascendencia, se prohíbe: arrojar en la vía pública líquidos de cualquier naturaleza, descargar en el acera el agua de los edificios, usar o volcar hacia la calle detergentes, productos clorados o alcalinos (que pudieran ocasionar daños al pavimento) y canalizar líquidos cloacales (aguas servidas) de pozos ciegos a la vía pública y/o al interior de inmuebles o terrenos baldíos.

De no cumplir con los ítems especificados, OSSE queda facultada para dar intervención al Tribunal de Faltas de General Pueyrredon, aplicar un cargo por mal uso del agua y hasta restringir o cortar el servicio en el caso que corresponda.

EL SEGUIMIENTO

El Cuerpo Único de Inspectores, dependiente de la Gerencia de Calidad de OSSE, dividió el ejido urbano en 45 zonas con el objeto de distribuir los controles en diferentes sectores día a día.

Aún así, se utilizan guardias para cubrir toda la franja horaria durante la semana y los sábados y domingos. Asimismo, se establecen actuaciones especiales para acudir a los sectores que quedaron excluidas del perímetro definido para la fiscalización.

La dependencia tiene a su cargo el labrado de cédulas de notificación (informando al usuario acerca de la falta), actas de constatación (de acuerdo a cada irregularidad cometida) y actas por pérdidas internas con plazo de reparación y fecha de nuevo control.

También implementa los controles de actuación, útiles para verificar si se cumple lo actuado o intimado, sobre todo en lugares conflictivos. Es decir, es la forma más conveniente para asentar que se realizó una solicitud de intervención.