“Los fieles tienen intuición y son capaces de reconocer a un verdadero sacerdote de uno que perdió el camino justo”, sostuvo este sábado Bergoglio durante la homilía de la misa que celebró en la casa de Santa Marta.

“Nosotros, los sacerdotes, tenemos límites”, sostuvo el Papa.

“Somos todos pecadores. Pero si vamos con Jesús y buscamos al Señor en la oración somos buenos sacerdotes; pero si nos alejamos de Jesús tenemos que compensar esto con otras actitudes mundanas”, agregó.

Francisco sostuvo que “así aparecen estas figuras: el cura negociante, o el cura empresario”, pero insistió en la prevalencia del “cura que adora a Jesús, el que habla con Jesucristo, el que busca Jesús y que se deja buscar por Jesús: éste es el centro de nuestra vida. Si no está ésto, perdemos todo”.

El Papa Francisco criticó a sacerdotes en manos de la vanidad, definiéndolos como “curas mariposas”, según resalta la agencia ANSA, “pero es bello encontrar curas que dieron su vida como sacerdotes realmente, y de los cuales la gente dice que aunque tenga un caracter fuerte, esto o lo otro, es un cura”.

“La gente tiene intuición: cuando ve a los curas que en vez de tener a Jesús poseen pequeños ídolos, dice ´pobrecito´”, completó.