El “milrayitas” volvió a superar a Quilmes para liderar 2 a 1 la serie de cuartos de final y quedar a un triunfo del pase a la siguiente instancia. El partido fue muy parejo, los de Luro y Guido estuvieron al frente durante la mayoría del tiempo, pero en el complemento apareció Facundo Campazzo, se cargó el equipo al hombro y demostró todo su potencial dentro de la cancha.

El base cordobés volvió a ser la figura del clásico: 32 puntos, 7 rebotes y 8 asistencias. Durante la primera mitad aportó 8 unidades, anotó 13 de los 19 de Peñarol en el tercer cuarto, y completó la jornada con 11 más en el último periodo. Intratable.

Maximiliano Maciel, que salió de titular en lugar de Romero, terminó siendo el goleador “cervecero” con 17 unidades; y el pivot que se quedó en el banco en el inicio del juego, le siguió con 12 puntos. Baxley pasó desapercibido toda la noche, aportó 7 tantos.

Los tres cuartos iniciales fueron totalmente parejos, en el final de cada uno de ellos la diferencia máxima fue de dos puntos, pero en los últimos diez minutos Peñarol pisó el acelerador impulsado por la fantástica tarea de su base, y con un parcial 24-13 terminó el encuentro con tranquilidad.

Durante el primer periodo los internos tuvieron un peso importante. Ramella utilizó una táctica distinta y envió a Maciel desde el comienzo, que respondió con 8 puntos en el cuarto, pero enfrente replicaron Leiva (6) y Gutiérrez (4). Quilmes mostró una buena efectividad en sus lanzamientos triples (4/6) y llegó a sacar 8 de diferencia, Peñarol insistió con jugar dentro e igualó el tanteador al finalizar el chico, 19 a 19.

Pasaron trece minutos de juego hasta que llegó el primer punto de Walter Baxley desde la línea de libres, y apenas sumó un doble más hasta el entretiempo; pero Quilmes no lo sintió en el segundo cuarto debido a que apareció en su mejor versión Diego Romero, que marcó 12 puntos en el periodo con planilla perfecta (5/5 dobles, 2/2 libres y 2 rebotes). Peñarol repartió su goleo entre siete jugadores, pero le costó mucho penetrar la defensa del “tricolor”, y así llegó al descanso largo por debajo en el marcador, 39-37.

El “cervecero” volvió mejor y marcó un parcial 7-2 en tres minutos para estirar la brecha a 46-39 con un buen trabajo colectivo, sin embargo un solo jugador se encargó de burlar la estrategia defensiva de Ramella: Facundo Campazzo. El base acumuló 13 tantos en el periodo y empujó a su equipo, le sacó la cuarta falta a Mario Ghersetti y convirtió el triple en los segundos finales para que Peñarol pase al frente de cara al último cuarto, 55-56.

El capítulo final de la noche se dividió en dos. Cinco minutos donde se mantuvo la paridad y los equipos no lograron sacarse diferencia, y el tramo donde Campazzo volvió a vestirse de mago anotando puntos y haciendo jugar a sus compañeros, que le permitió al “milrayitas” llegar a al cierre del juego con 10 puntos de diferencia en el luminoso, y así terminar la noche con cierta tranquilidad.

El jueves se disputará el cuarto punto de la serie, que lidera Peñarol 2 a 1.

-Síntesis-

Quilmes (68): Fabián Sahdi 8, Walter Baxley 7, Federico Marin 8, Maximiliano Maciel 17, Mario Ghersetti 8 (FI); Luca Vildoza 6, Diego Romero 12, Tayavek Gallizzi 2, Lucas Ortiz 0, Facundo Piñero 0. DT: Leandro Ramella.

Peñarol (80): Facundo Campazzo 32, Forrest Fisher 8, Adrián Boccia 10, Leonardo Gutiérrez 9, Martín Leiva 11 (FI); Isaac Sosa 3, Matías Ibarra 3, Franco Giorgetti 3, Gabriel Fernández 1, Axel Weigand 0, Santiago Giorgetti 0. DT: Fernando Rivero.

Parciales: (19-19), (39-37), (55-56) y (68-80).

Árbitros: Daniel Rodrigo – Roberto Smith – Leonardo Zalazar.

Estadio: Polideportivo Islas Malvinas.
Los Martines