“Tomamos nota de cada una de las sugerencias e inquietudes que plantean los usuarios para seguir enriqueciendo esta herramienta de prevención, que a pocos meses de su lanzamiento ya tiene una alta adhesión y aceptación”, dijo el presidente de Provincia Seguros, Alberto Haure.

La aplicación está disponible para todos los usuarios de celulares dentro de la Argentina que poseen sistemas operativos IOS (Apple) y Android (Google); mientras que las versiones para Windows Phone y RIM (Blackberry) se encuentran en etapa de prueba y en breve estarán disponibles para ser descargadas.

La aplicación ha liderado los rankings de descargas, con más de 1200 comentarios, cuyas valoraciones alcanzaron los 4 puntos de un total de 5. Se toman en consideración todos los comentarios, se trabaja sobre ellos para perfeccionar la aplicación mediante actualizaciones y ya se esta desarrollando una nueva versión que se lanzará durante el mes de agosto.

ACCESO DIRECTO

Entre las últimas mejoras, el Botón de Alerta incorporó un “widget” para los teléfonos que utilizan el sistema operativo Android -el más popular- para que se pueda activar la alerta en forma directa desde el “escritorio” o pantalla principal, sin pasos intermedios.

Por otra parte, la aplicación también ofrece alternativas ante eventuales fallas por falta de señal. “Estas cuestiones competen a fabricantes de GPS y a operadoras de telefonía celular. Frente a esto, el ”Botón de Alerta“ envía datos geolocalizados por GPRS (de menor precisión) cuando no puede acceder a información de GPS, y puede enviar la alerta por SMS cuando no hay señal de datos”, dijeron los desarrolladores.

El sistema permite comunicar de manera rápida y sencilla cualquier emergencia, enviar mensajes de texto con la ubicación en la que se encuentra el usuario, enviar emails personalizados de texto o voz, y publicar en Twitter la alerta y ubicación.

Estas características hacen que la aplicación sea de gran utilidad ante distintos tipos de emergencias: víctimas de hechos de violencia, urgencias médicas, adolescentes que se sientan amenazados, adultos mayores que estén perdidos, personas con discapacidad.