En medio de un escenario de alta inflación que pulveriza los salarios, algunos candidatos de derecha proponen eliminar el peso y dolarizar la economía, lo que no explican es cuánto se devaluaría el sueldo de los trabajadores.

La periodista de C5N Rosalía Costantino tomó el salario promedio de un trabajador registrado del sector privado, que es de 200.000 pesos, con un dólar blue a 400, el salario pasaría a ser de 500 dólares.

En este contexto, explicó que esto sería en una “primera etapa de la dolarización”, ya que cuando se empiezan a liberar los pasivos remunerados en pesos (plazos fijos y bonos), el dólar pasará a costar $2000. Este número se desprende de la división del total de las reservas en dólares que hay actualmente en el Banco Central, con la cantidad de pesos circulantes.

Entonces, sobre un salario de 200 mil pesos, con un dólar a 2.000, el salario promedio queda en 100 dólares.

“Esto es lo que da si se dolarizara hoy, este número cambia de acuerdo a la cantidad de dólares que haya en el Banco Central y con el cambio de los pasivos remunerados. Cuando la dolarización termine, el dólar terminará en $8000 por lo que el salario de 200 mil pasaría a ser de 25 dólares, con la imposibilidad de aumentar los sueldos porque no tenés forma de emisión”, resaltó Rosalía Costantino.

También, aclaró que mientras el proceso de dolarización de la economía se produzca, habrá alta inflación o hiperinflación.

Pero todo se torna más oscuro si se toma el salario del trabajador informal, que en diciembre era de $56 mil pesos. En tanto, los monotributistas tienen un promedio de $86 mil. Si el cálculo se hace sobre el promedio de todos los salarios (registrado, informal y monotributista) que es de 82 mil, dividido por $2000, el número sería de 41 dólares.

La periodista resaltó: “Todo esto se da en un escenario de fuerte crecimiento económico, lo que significa es que el crecimiento fue al capital y no al trabajador, porque al salario se lo comió la inflación. Los empresarios ganaron y los trabajadores perdieron, esto es una redistribución regresiva del ingreso, y este es el eje central del reclamo de Cristina Kirchner”.

“En diciembre de 2015, previo al macrismo, el salario promedio en dólares era de 1100 dólares”, concluyó.