La histórica ceramista Cerro Negro, una de las principales fuentes de empleo del partido bonaerense de Olavarría, solicitó un Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, lo que encendió las alarmas en el sector obrero por el posible despido de hasta 500 trabajadores en sus plantas de Olavarría, Córdoba y Campana (Cormela). La medida incluye suspensiones con salarios reducidos y, en una segunda etapa, cesantías con indemnizaciones al 50%, según contempla el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo.
El secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Ceramistas de Olavarría (SOECO), Gustavo Bustamante, confirmó que el trámite ya fue presentado por Cerro Negro y está en evaluación. “Cerro Negro presentó el PPC por las tres plantas: Olavarría, Córdoba y Cormela, una fábrica que tienen en Campana. Todavía no lo tienen aprobado porque lo tienen en trámite. Podemos esperar cualquier cosa del Ministerio de Trabajo de Nación”, advirtió el dirigente sindical.
Bustamante señaló que el plan inicial de la empresa es suspender personal por un plazo de 60 días, iniciando por la planta de Olavarría: “En Olavarría arrancarían el 16 de junio con una línea, el 23 de junio pararía otra, y entre agosto o septiembre frenaría la planta de ladrillos”. También habría parálisis en las fábricas de Córdoba y Campana.
La propuesta empresaria incluye suspensiones con un pago del 70% del salario neto, en un contexto en el que el gremio aún no logró cerrar la paritaria 2024-2025. “No pudimos cerrar las paritarias, solamente recibimos en todo el año un 19% de aumento, cuando estamos hablando de una inflación interanual de mayo a abril del 47% o 48%. Estamos casi 30 puntos abajo”, enfatizó Bustamante.
El punto más conflictivo del PPC solicitado por Cerro Negro es la posibilidad de despedir trabajadores con una indemnización reducida al 50%, como establece el artículo 247 en situaciones de crisis. “Dentro del PPC esto también lo plantean. Hace rato que venimos diciendo que esto va de peor en peor. No vemos ni a mediano ni a largo plazo que esto mejore con las políticas que tenemos. Ellos están viendo que esto no va a mejorar, por eso están planteando el artículo 247, es decir, despedir por el 50%”, afirmó el titular de SOECO.
En concreto, de aprobarse este procedimiento, se podría avanzar en la desvinculación de hasta 500 trabajadores en las tres plantas. Solo en Olavarría, las primeras suspensiones impactarían a unos 200 empleados, y la línea de ladrillos afectaría a entre 48 y 52 obreros adicionales.
La crisis de Cerro Negro no es nueva. En los últimos meses, la empresa ya había despedido a 96 trabajadores sin abrir el procedimiento preventivo ni dialogar con el gremio, lo que desató un conflicto que incluyó bloqueos, huelgas y cortes en la Ruta 226. La intervención del Ministerio de Trabajo derivó en una conciliación obligatoria, tras la cual se reincorporaron 37 empleados, 33 aceptaron retiros voluntarios y 26 fueron desvinculados definitivamente.
En asamblea, también se resolvió mantener paralizada una de las tres líneas de producción en Olavarría. Según Bustamante, “el 90% de la industria ceramista nacional está en crisis, con suspensiones y despidos. Es un caos”.
La empresa emplea a un número significativo de trabajadores con años de antigüedad, lo que agrava el impacto social de las medidas, especialmente en una ciudad como Olavarría, donde el mercado laboral es limitado. “El mercado no absorbe fácilmente a personas mayores de 40 años”, remarcan desde el sindicato.
El gremio FOCRA y otras entidades del sector ya advirtieron que, si no se revierte la situación, se profundizarán las protestas y movilizaciones. Mientras tanto, los trabajadores permanecen en estado de asamblea permanente, a la espera de definiciones.
Por ahora, todo depende del Ministerio de Trabajo de la Nación. De aprobarse el PPC, se habilitaría una etapa crítica de suspensiones y despidos, que podría desatar una nueva ola de conflicto gremial y dejar sin sustento a cientos de familias.
