Este jueves en el marco de una jornada de reclamos a nivel nacional, trabajadiores del Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur (Inareps), dependiente del Gobierno Nacional, volvieron a movilizarse para visibilizar la situación que atraviesa la salud pública en general y sus trabajadores en particular, sobre todo luego de las últimas medidas adoptadas por el presidente Javier Milei que vienen a profundizar el deterioro laboral de quienes sostienen con su labor diaria las prestaciones sanitarias.
Fueron acompañados en la jornada de lucha por diversos sindicatos y organizaciones de estatales, docentes universitarios, científicos del Conicet, Madres de Plaza de Mayo y judiciales. Pero también se sumaron pacientes a la acción directa, que no incluyó cortes de ruta pero sí reparto de volantes en los semáforos.
En ese contexto, Cazador de Noticias dialogó con Juan Bustamante, delegado de Ate en el Inareps, quien señaló que “somos el único centro público de rehabilitación psicofísica del país., y desde el 2022 no nos subieron nunca más el presupuesto, nos venimos manejando con ese mismo presupuesto y ahora con la creación de la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES), ya no vamos a tener control administrativo desde Mar del Plata: todo pasará por Buenos Aires”.
A pesar del recorte, Bustamante destacó “tenemos un servicio de excelencia porque los compañeros laburan de corazón. Pero los residentes ganan $700 mil y trabajan jornadas completas, con pacientes internados y sin vacaciones”.
Por último, cuestionó que con respecto a las paritarias que “nos dieron un 1,6% en tres cuotas. No esperamos más nada. Con un sueldo de $600 mil no llegás a fin de mes ni loco, tenés que tener otro trabajo sí o sí y se complica”.
