Según el último estudio nacional de la consultora Zuban Córdoba, realizado entre el 15 y el 17 de julio con 1300 casos en todo el país, el 56,8% de los encuestados desaprueba la gestión del gobierno de Javier Milei, mientras que solo el 42,8% la aprueba. La polarización se acentúa con el crecimiento del “antimileísmo” como identidad política, que ya alcanza al 53,6% de los consultados, frente a un 28,1% que se identifica como mileísta.
El informe, dirigido por Gustavo Córdoba y Paola Zuban, advierte que más del 52% del electorado votaría en las elecciones legislativas de octubre para castigar al gobierno, mientras que un 38,3% lo haría para premiarlo. Entre quienes votarán para castigar, los principales motivos son la destrucción del Estado y las políticas públicas (25,5%), y la percepción de un gobierno "cruel" (25,4%).
Por el contrario, quienes acompañan a La Libertad Avanza valoran principalmente el control de la inflación (25,1%), la honestidad (23,6%) y el enfrentamiento con la “casta política” (19,7%).
También se refleja una crisis de representación: aunque el 68,1% cree que su voto tiene impacto en las decisiones políticas, uno de cada cinco considera no votar en octubre.
El informe remarca que la famosa grieta sigue viva, aunque hoy resignificada entre el mileísmo y el kirchnerismo, sectores que concentran las adhesiones y los rechazos más marcados del electorado.
“Los datos hablan de vínculos rotos, de expectativas defraudadas, y de un Estado que muchos perciben como distante —o incluso hostil—”, señala el informe. La política, advierten desde Zuban Córdoba, debería dejar de mirar solo a los trolls y empezar a preguntarse por los vínculos reales con la ciudadanía.
