A pesar de la veda electoral, el intendente Guillermo Montenegro parece que sigue en campaña y de ufanarse de los procedimientos de la patrulla municipal para perseguir a personas en situación de calle, pasó a victimizarse y a cuestionar la resolución de la jueza Mariana Haydee Irianni, del Juzgado de Responsabilidad Juvenil N°2, que ordenó a la Municipalidad que “garantice en forma real y efectiva un servicio de transporte públicos de pasajeros básico y gratuito el para el día 7 de septiembre de 2025, durante el horario de votación” advirtiendo que, en caso de incumplirse la medida, se aplicarán sanciones previstas en el Código Penal. Además, se inscribió la causa en el Registro de Procesos de Incidencia Colectiva, al tratarse de un reclamo que involucra a un universo amplio de ciudadanos.

Pese a que desde que arrancó su campaña como candidato a senador provincial de la Alianza La Libertad Avanza contrató a casi 20 medios y sólo en julio desembolso de las arcas municipales $435 millones en pauta, ahora, en sus redes sociales, arguyó que la medida es imposible de cumplir porque el costo del servicio, que ascendería a 300 millones de pesos, lo pagarían los vecinos de la ciudad. Es por ello que notificó la resolución al Ministerio de Transporte provincial para que decida cuales son los pasos a seguir.

Una situación similar en la que las decisiones de Montenegro perjudicaron a los usuarios marplatenses y batanenses, se dio cuando ante el desentendimiento del Gobierno Nacional encabezado por Javier Milei, el gobernador bonaerense aumentó el 110% los subsidios al transporte para 23 municipios, incluido General Pueyrredón, destinando $2068 millones de pesos a este régimen transitorio de subsidios. Sin embargo en aquella oportunidad mientras otros municipios aledaños como el de Villa Gesell tomaron la decisión de reducir el costo del boleto para los usuarios, la decisión política de Montenegro, tiñéndose de violeta, fue la de mantener el aumento que había resuelto con antelación y el boleto siguió siendo uno de los más caros.

Cabe también traer a colación que el primer aumento de boleto otorgado por Montenegro en agosto de 2020 llevó el valor del mismo a $35,24. El valor actual del boleto es de $1360 lo que representa un aumento del 3760 por ciento. La inflación acumulada desde agosto de 2020 hasta el dato relevado por el Indec del mes de junio de 2025 fue de poco más del 500 por ciento. La exorbitante diferencia entre la evolución de la inflación y el valor del boleto debería ser explicada por el Intendente municipal antes de irse de la ciudad como ha manifestado, teniendo en cuenta por sobre todo que el alto costo que pagan los usuarios no admite la más mínima comparación con los servicios que se prestan a valores aún más baratos en otras grandes ciudades de la Argentina, tales los casos de Bahía Blanca, Rosario, Santa Fe entre otras.