El intendente municipal, Gustavo Pulti, recorrió en la mañana de este viernes las obras de puesta en valor del Instituto Saturnino Unzué, ubicado sobre el Acceso Norte, el cual ha sido declarado Monumento Histórico Provincial, según Ley 11242.
Próximo a cumplir 100 años, se trata de un bien que ha sido declarado de interés patrimonial por Ordenanza 10075.
La primera etapa de la obra se inició en marzo del año pasado y está centrada en 1700 metros cuadrados sobre la calle Río Negro. Está previsto que se finalice en febrero del año que viene, con un presupuesto de 5 millones de pesos, aportados por el gobierno nacional.
“Son obras que han empezado antes de que asumiéramos nuestra gestión, por la inquietud de muchas personas e instituciones, como la cooperadora, y de gestiones de todos los niveles públicos, que estuvieron interesados en que esta obra se llevara a cabo”, sostuvo el Jefe Comunal.
Gustavo Pulti ponderó la reparación histórica de un edificio muy importante de la ciudad “que hemos decidido involucrarnos para que siga adelante porque es importante para los marplatenses, para la identidad de Mar del Plata, como infraestructura turística y cultural. La obra toma nuevamente fuerza en la continuidad de un trabajo que tiene que asegurar que llegue a su fin. Hay financiamiento importante del gobierno nacional y hay una voluntad de todos los sectores para que se finalice”, destacó el Intendente.
El Jefe Comunal reconoció que hubo algunos momentos en que la obra se paralizó porque se debieron actualizar los valores. “Ahora estamos en marcha y con la decisión de que termine esta primera etapa, en la que trabajan 150 obreros de la construcción, muchos de los cuales se han capacitado para reparar un edificio histórico como éste”.
En ese sentido, el Ejecutivo local afirmó que “estamos rescatando y representando la opinión de muchos marplatenses que quieren que este edificio se mantenga y pueda incorporar nuevos usos como centro de convenciones, y nuevos sentidos culturales y turísticos”.
Elida Vázquez de Turno integra la Cooperadora del Instituto y advierte que no se trata de una obra común. “Hay muchas dificultades para avanzar en el edificio. Tiene muchos años, la corrosión, su particular posición geográfica, al lado del mar, que afecta su estructura, el poco mantenimiento. El edificio va camino a cumplir 100 años y su puesta en valor debe ser un compromiso de todos”, aseguró.
Carlos Gindre, de la empresa constructora, reveló que los planes de obra cambiaron y de restaurar el edificio se pasó a construir un centro de convenciones. “Esta primera etapa comprende la construcción de un teatro auditorio para 200 personas y 3 salones también para 200 personas cada uno, la instalación de un ascensor hidráulico y el mantenimiento del valor patrimonial del edificio, con sus escaleras de mármol y sus aberturas de madera”.
El constructor anticipó que la fachada se mantendrá tal cual el origen del edificio. Se hicieron nuevos tratamientos para que pueda soportar el paso del tiempo y los efectos del mar.
“Luego, la segunda etapa es el sector de la calle Santa Cruz, unos 2500 metros cuadrados. Se licitaría a fin de año y tendría una duración de 2 años. La tercera etapa vincula el resto de la calle Río Negro y el sector de La Capilla y la última incluye el fondo y el parque. De no detenerse el proceso, no llevará menos de 6 años”, destacó.
