El principal reclamo de los habitantes del barrio es la falta de agua y servicios esenciales que ni el Municipio ni Juan Carlos Garcia, encargado del emprendimiento, les brindan a los mismos.

En Mirador de Peralta Ramos viven 120 familias entre las calles Peralta Ramos, Friuli, Benito Lynch y García Lorca, durante la reunión una de las vecinas indicó que “el tema nos supera porque en verano directamente no tenemos agua, somos clase media en edad productiva, tenemos hijos y el agua es elemental. Necesitamos una obra que nos de presión de agua”.

Ese barrio fue cedido por el Municipio de General Pueyrredón el 24 de marzo de 1994 a través del Expediente 1009-D-1994 durante la Intendencia de Mario Russak a Juan Carlos Garcia con el fin de construir viviendas de uso residencial obligando el Municipio a la empresa a construir en el predio establecimientos escolares además de ceder al Municipio las superficies destinadas a calles y espacios verdes, la misma ordenanza establecía un plazo de 4 años para terminar las obras del preescolar en caso contrario la ordenanza perdería validez, lo mismo que antes de iniciar las obras Juan Carlos Garcia debía tener la aprobación de planos y permisos de construcción por parte de Obras Privadas.

En otro pasaje de la charla, los vecinos que pertenecen a la Sociedad de Fomento El Martillo se quejaron por la falta de mantenimiento de los espacios comunes por parte de la misma, como así también la demora por parte de empresas de servicios para finalizar obras que ya se encuentran abonadas por los residentes.

Los Concejales se comprometieron a realizar todas las gestiones desde las comisiones de obras, legislación y medio ambiente para que estos problemas encuentren una inmediata solución y el Municipio tome carta en el asunto para que el Barrio Mirador Peralta Ramos vea finalizadas todas las obras de infraestructura que los vecinos se merecen desde hace años.